¿Fútbol?...No.

Cuando los hombres, los romanos, los griegos se batían en duelo con las bestias era un auténtico espectáculo para el pueblo. ¿Es que acaso era un hombre capaz de vencer a un león con tan sólo su propio cuerpo? Aquello sí que era digno de ver pues era algo insólito.
Desde luego, más inteligentes que ahora sí que éramos en la antigüedad. Ahora se merecen los cheques con infinitos ceros, y el reconocimiento, los futbolistas. No los médicos que salvan vidas, ni las asociaciones dedicadas a la pobreza. Un señor con corbata, que, ni siquiera practica el deporte puede hacerse rico a consta de éste.
¿Desde cuándo el deporte es y significa gritar a un árbitro “hijo de puta”? Pienso que el fútbol debería jugarse tal y como muchos deportes, para hacer ejercicio físico y para disfrutar.Deberíamos recordar pues, la verdadera e inicial intención del deporte.
Si tienes una camiseta con unos colores que signifiquen que perteneces a algún colectivo y entras en una ciudad distinta, eres bastante propicio a que te apaleen hasta dejarte inconsciente.El fútbol en la actualidad es pura política.Es la religión y la ideología del siglo XXI.
Y no importa nada, porque hay que defender al equipo y el orgullo es lo primero. Y además lo que más fastidia es que la frase “el fútbol mueve el mundo “sin duda, sea cierta.
Por una entrada para ver a 22 individuos correr tras una pelota se pueden llegar a pagar cantidades espectaculares.Cantidades que,además de engordar carteras de presidentes y jugadores, vacían al resto del mundo.Encima se regodean con que les dan trabajo a la población africana ,y lo único que hacen es comprar artículos deportivos a 2 euros,explotándoles,para luego venderlos a 30.Señores,lo peor,es que luego dicen estar en deuda.¿En deuda?Sí,con débitos de hasta miles de millones de euros.
En los tiempos que corren acusar al fútbol de “tontería” te puede ocasionar más de un problema. Al gobierno le interesa porque hay ganancia tanto económica como a nivel de imagen y promoción. Es cierto también que éste deporte acapara muchos puestos de trabajo y no lo dudo, pues un estadio necesita bastante mantenimiento. Pero claro, esto a lo que ahora llamamos “fútbol “lo hemos creado nosotros, osea, la propia sociedad en su afán de resaltar sobre las demás ciudades o países.
La invención de un sentimiento unificador con el que cada uno se siente identificado por su “equipo”,une a miles de personas frente al televisor o directamente en los estadios.Si buscáramos un adjetivo para calificar a la población éste seria “rebaño”.Si algo tengo que reconocer es que es espectacular,un fenómeno casi religioso o litúrgico,algo que se hace casi por obligación a la moral.
Palabras,invocaciones,llamadas al pueblo,hacen sentir a uno mismo integrante.Y es éste recurso lo que produce ese casi mágico contagio,que al fin y al cabo sólo es unión a la fiesta y un intento del ser humano por naturaleza, a la integración con sus semejantes.
Un territorio puede destacar por muchas cosas: por su gastronomía, por su personalidad, por sus recursos…pero… ¿por 22 hombres a los que se les da bien jugar al balón-pie? No lo entiendo, que alguien me lo explique.Que alguien tenga el valor decirme qué estamos haciendo.