A mil destellos por segundo.

No eres tú;eres otra persona.
Los sentidos me están jugando una mala pasada,me engaño,te quiero,lloras,me largo.
Tu mirada se perdió un día como hoy,pero yo no estaba a tu lado cuando sucedió,y me culpo por ello.
¿Me reconoces?No lo sé.Con mucho esfuerzo dices mi nombre si te lo pregunto y tengo miedo de que sino lo hago a menudo...puede que lo olvides.
Un segundo...una conexión cerebral menos,un momento menos en la memoria.
Dos segundos,página cinco del álbum de fotos de tu vida.Te la arrancan.
Tres segundos,la foto de tu boda en blanco y negro.Se quema.

Las actividades cotidianas son una odisea.No comprendo porqué la vida quiere matarte tan lentamente.
Ahora mismo tienes más de tí allí que aquí;y te miro fijamente a los ojos buscándola,buscando en la sombra de tus párpados a la muerte para hablar con ella cara a cara.Quiero pedirle explicaciones.

Deambulo por la casa mientras me vigilas,¿y en qué piensas?me pregunto.

Jugamos a las palas y dejas que la pelota caiga al suelo sin intentar recogerla.Bota,y luego rueda hasta que encuentra un obstáculo.

Yo sé que algo de tí hay en ese cuerpo,o quizás me miento,y ya hace mucho que te has ido.
Mi busca es en vano,pues mientras yo vivo tu mueres,paulatinamente,suave,sin que nos demos cuenta.

Y cuando un día no estés ni tu ni tu cuerpo,y ya no te envuelvan mis besos en la mejilla sino la fría y oscura tierra,habrá ocurrido...el alzheimer te habrá ganado la batalla.